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Política para seriéfilos

Sobre la violencia de género en Juego de Tronos.

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De psicopata a psicopata y tiro porque me toca

De psicopata a psicopata y tiro porque me toca

El presente post hace una lectura de Juego de Tronos hasta lo que ocurre en el capítulo 5×06, del que si no has oído hablar tienes mi admiración por el escondite que has encontrado. Mencionará también series como The Good Wife, Anatomía de Grey o Utopía (sin profundizar en las tramas), así que sensibles ante los spoilers, avisados estáis. No incluye ninguna mención al 5×09, pero, desde luego, creo que aplica cada uno de los aspectos que se tocan en el post.

La última temporada de Juego de Tronos ha estado rodeada de una importante polémica acerca de las escenas de violencia de género. La polémica desencadenada por la última escena del 5×06 entre Sansa y Ramsay ha acarreado una relectura de varias escenas que ya levantaron polémica  (la violación de Jaime a Cersey en la temporada anterior) e incluso revisiones de algunas que, en su momento, no habían sido asociadas especialmente a la violencia de género (lo que ocurre con la mujer de Robb Stark en la célebre boda, o el primer encuentro entre Khal Drogo y Daenerys en la primera temporada). Hasta el propio George Martin ha tenido que salir a defender su punto de vista ¿Se ceba la versión televisiva de Benioff y Weiss con las mujeres? ¿Podemos pensar que Juego de Tronos es una serie machista?

Juego de Tronos no es una serie feminista… ni machista:

Lo primero que creo que hay que tener en cuenta es que Juego de Tronos es una serie coral en la que hay una gran cantidad de personajes con tramas y actitudes propias, relacionados con una gran trama transversal. Dado que aún la trama que les une no parece lo bastante desarrollada para plantearse su contenido desde la perspectiva de género, solo nos podemos acercar a los casos particulares.

Hace unos años Juego de Tronos se valoró como una serie feminista. Tanto es así que hasta la obra colectiva dirigida por Pablo Iglesias (el de Podemos) sobre la serie tiene un capítulo dedicado a la temática. La presencia de personajes femeninos fuertes ensalzaba la ficción hasta la reivindicación simbólica de sus personajes en conflictos sociales y políticos (¿qué líder español no se ha reivindicado aún como Khalessi?).

Juego de Tronos, al menos en sus tramas no es especialmente machista. Hay personajes femeninos que no son comparsas de personajes varones, y que tienen voluntad, decisión e intereses propios. Por ejemplo, Daenaerys y Cersey, son personajes que quieren ejercer el poder (algo muy polémico hoy en día, como se ha podido ver en la sexta temporada de The Good Wife), e incluso hay personajes positivos que hacen transgresiones del rol de género frontales (como Brienne o Arya). Sin embargo, uno de los personajes más “positivos” de la serie, Katheleen Stark, es el puro ejemplo del rol típico de género como madre y esposa devota (quizá lo que le pasa en la Boda Roja encierra algún tipo de moraleja).

Si bien no convierte el tema de género en algo medular, no ha tenido ningún problema en dar a muchas mujeres roles propios, protagonistas y no dependientes. Por lo que se refiere a las tramas no la llamaría machista (aunque insisto que eso no la convierte en feminista). No es necesario: no todo en la vida debe pronunciarse ante todos los debates.

Sin embargo creo que una serie que no es machista no es automáticamente feminista. El test de Bechdel que se ha generalizado como “la regla del 9” del feminismo se basa en que la historia tenga a dos mujeres y no hablen de hombres. Sin embargo, aunque esto haga que descartemos que una serie es machista (y no tanto… porque imaginemos que al final una de esas dos mujeres tiene que ser salvada por un hombre), no creo que la convierta en feminista. En mi opinión, para poder considerar una serie como feminista sería necesario:

  1. Que los personajes femeninos tengan que enfrentarse a conflictos derivados de los estereotipos de género
  2. Que para resolver esos conflictos, las mujeres no tengan que ser extraordinarias (como ocurre en The Fall, de la que ya hablamos)

Visto así, y esto va a ser polémico, el arco argumental de la undécima temporada de Anatomía de Grey, cuando Meredith decide que puede vivir y realizar su carrera sin tener a su marido a su lado, es mucho más feminista que la mayoría de las series de tv, incluido Juego de Tronos.

¿Quieres un yogur?

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Violencia y banalización

Juego de Tronos es una serie que busca generar un paisaje violento. No se trata de un tema netamente estético, sino que es parte muy importante de su propuesta narrativa: lo que es capaz de hacer el hombre, especialmente en contextos sin poder, o en los que el poder está en juego. Como señala el autor, el hecho de que haya fantasía no significa que el universo que dibuja no tenga una coherencia interna propia en la que no todo sea justo. No obstante, y sin querer sonar moralista, el consumo de violencia audiovisual se ha disparado. En los 15 años que han pasado desde el estreno de 24, las torturas “normales” no escandalizan al público televisivo. Escenas como la del baile en Reservoir Dogs, que provocaron polémicas posiblemente ahora pasarían desapercibidas. La saga de películas Saw ha ido aumentando escalarmente el contenido violento de sus escenas hasta llegar a ser calificada X en España.

Esta escena en su momento fue muy polémica, hoy es un martes en 24

Esta escena en su momento fue muy polémica, hoy es un martes en la vida de Jack Bauer

Si quieres hacer, en la actualidad, una serie en la que la violencia extrema sea un problema, tenemos que ir a cotas más elevadas. Daredevil ha tenido que usar escenas realmente extremas para mostrar los límites de Mr. Fisk. Utopía, otra serie que ha utilizado la violencia como recurso narrativo, despachaba niños en su primer episodio y, además, utilizaba una estética premeditadamente incómoda para transmitir desasosiego al público.

En este sentido Juego de Tronos  siempre ha ido a por todas. Desde su primer capítulo ha mostrado que nadie está exento de esa violencia (el mítico final de Baelor, en la primera temporada lo dejo claro) tanto en el plano de la historia (Ned Starck), como en el plano de la “moral del público (mujeres, niños, animales…). Esto realmente aumenta la sensación de inseguridad del público. El uso de la violencia ha sido ha acentuado escenas cumbre, llegando a cimas realmente difíciles, bien sea por explícitas como la cabeza de Oberyn reventando, o implicitas, como el corte del pene de Theon.

¿Qué pasa con la violencia contra las mujeres? Realmente la violencia empleada contra las mujeres no ha sido, en comparación, igual de cruda que la que han recibido los hombres. Hay menos mutilaciones y desmembramientos. De hecho, solo hay dos escenas peculiarmente brutales hacia ellas (quitando las violaciones): por un lado, en la presente temporada Ramsay Nieve Bolton arranca la piel a una anciana que quiere ayudar a su esposa. En la mítica Boda Roja la mujer de Robb Stark, que está embarazada, es apuñalada en el vientre en una de las escenas que a mi me han dejado más traumatizado (dicen que no debes matar a una embarazada y a un animal en una ficción y en la célebre boda la serie hace ambas cosas, lo que indica que van directamente a provocar incomodidad). En ambos casos entiendo que el propósito es mostrar el grado de violencia al que están dispuestos a llegar determinados personajes.

Entiendo que, en proporción, el número de escenas de violencia física al que se somete a las mujeres es mucho menor que en el caso de los varones. Sin embargo, se ha provocado más ruido, especialmente cuando se trata de violación (sólo 2, pero que han tenido más predicamento que, por ejemplo, la amputación de una mano en crudo, o que quemar a miles de personas). De hecho, las condenas a que la serie es más machista que los libros son inquietantes si contamos el número de violaciones (más en los escritos) o el hecho de que Daenaerys fuera violada en la serie y no en el libro (parece que el sexo consentido de los esclavos, que es como ella es vendida, no se considera violación).

¿Es moralmente peor? No lo creo. Sin embargo desde luego, en el lenguaje audiovisual las mujeres han estado más excluidas de escenas de violencia física, especialmente en la explicita. Se ven menos mutilaciones, palizas, desmembramientos o asesinatos ¿Quizá es algo metido en la moral conservadora de proteger antes a seres “débiles” como mujeres o niños?  Además, el público puede empatizar más fácilmente con la violación que con la explosión de una cabeza con las manos.

¿Debe excluirse el uso de la violencia contra las mujeres del discurso audiovisual? Realmente no lo creo. De hecho, entiendo que lo normal es que si quieres hacer una historia en la que la violencia es cruel, extrema e indiscriminada es inevitable recurrir a ello y cada vez más, dado que el cauce de la violencia contra los hombres parece banalizado a niveles casis infinitos.

¿Convierte esto a una ficción en machista? No lo creo, porque no genera un posicionamiento moral positivo de la violencia (aunque posiblemente más de uno se “alegró” de la violación de Cersey porque es muy mala, igual que se alegro de las torturas a Theon). ¿hace apología de la violación? No . ¿Se ceba más con las mujeres? Estradisticamente no ¿Somos más sensibles ante la violencia contra las mujeres? Muchos si lo somos ¿Esta fundamentado? Dadas las cifras de feminicidios, violaciones y demás, desde luego.

Entonces ¿Tenemos que protestar ante las quejas y las acusaciones? Parece más sano un mundo en el que la gente protesta por la escenificación de torturas, violaciones, asesinatos y demás que uno que no lo hace. Lo que si que creo es que hay una sobrerreaccion comprensible de colectivos muy sensibilizados ante determinados símbolos, aunque creo que muy equivocada en la interpretación de cómo luchar contra la violencia contra las mujeres.

Sin embargo, lo que si que creo es que cuando consumes una historia tienes que ser consciente de lo que propone, y saber si es algo que te interesa experimentar. A mi por ejemplo no me gusta absolutamente nada el cine de terror y procuro no verlo nunca. Si me repugnara la violencia procuraría no verla de ningún modo, y si de lo que se trata es de convertir la violencia en el contexto de la historia realmente no vería Juego de Tronos (o Utopía, o las pelis de Tarantino), pero no porque esten mal, sino porque son propuestas que me incomodan.

 

 

 

Autor: craselrau

doctor en ciencias políticas, friki, cocinillas y bloguero. Analista web y colaborador en todoseries.